miércoles, 17 de diciembre de 2008

UN VAGABUNDO PUBLICISTA

Esta práctica consiste en la utilización de Wikipedia y de la Enciclopedia Británica.

El tema que he seleccionado es la vida que llevan los vagabundos, estoy impresionada, en Pamplona no he visto a ninguno por la calle.


Busqué en wikipedia a partir de la palabara vagabundo, enlacé con una página web http://www.enredpsh.org/ es un Red Nacional de entidades que trabajan con personas sin hogar, ahí pude recoger algunos datos interesantes recogidos por el INE en diciemnbre del 2007 como por ejemplo que el 82,7% de las personas sin hogar son varones o que la edad media de este colectivo es de 37,9 años y suus ingresos medios son de 302 € al mes.

Un 46% de esta población tiene hijos, aunque sólo una décima parte vive con ellos. En copntra de lo que todos creíamos, el 30% de las personas sin hogar es abstemia, no beben, y nunca ha consumido drogas. El 37,5% lleva más de tres años sin alojamiento propio y la mitad de la población sin hogar busca trabajo ya sea fijo o temporal. Parece impensable que en un país con el nivel de desarrollo cómo es el de España, la cifra total de personas sin hogar supere los 21.900 sobre las 44.700 mil que hay en total.
A continuación cuelgo un video de un estudio realizado por Caixa Cataluña, la noche de marzo del 2008, sobre el perfil de las personas que viven sin hogar en Barcelona. no he cpnseguido descargármelo asi que lñes pongo un enlace en el que se puede ver, merece la pena. Video El "sin techo de BCN es varón, de 41 años, foráneo y con ingresos.


UN VAGABUNDO PUBLICISTA ( una historia real)

En la esquina del estadio Santiago Bernabeu de Madrid trabaja un vagabundo,es mayor, tiene la cara muy arrugada y siempre lleva un gorro de paja roto y un chaquetón muy sucio,pero digo bien, trabaja, puesto que se pasa sus ocho horas y gana una media de 25€ al día.
Allí estaba él, pidiendo dinero sentado en una banqueta y a sus pies tenía una caja de cartón escrita por dos caras. En una decía "Soy pobre, pido dinero para un chalet en la playa", en la otra "soy pobre pido dinero para un porche" me paré porque me hizo mucha gracia que hubiera escrito eso.
Después de 10 minutos de conversación le pregunté por qué no había escrito en la tercera cara de la caja que podía ser leída por las personas que pasaran cerca de él, a lo que me contestó que no se le ocurría nada. Le dije que yo tenía una frase en la cabeza y sin decírsela me dejo apuntarla, añadí "Soy pobre, pido dinero para un lifting". Nos reímos un rato juntos, él no sabía que era eso y cuando se lo expliqué no daba crédito, -Bien me vendría- decía, mientras que sonreí dibujándose en su cara más arrugas.




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